En una entrevista exclusiva, el Licenciado en Economía Ariel Maximiliano Peralta, egresado de la Universidad de San Martín y miembro del área técnica del Ministerio de Economía, analizó el impacto de las criptomonedas en la economía argentina, el contexto cambiario actual y el rol de los monopolios en la generación de precios.
En el actual escenario económico argentino, los debates en torno a las criptomonedas, la política cambiaria y la estructura productiva cobran una relevancia fundamental. En diálogo con este medio, el economista Ariel Maximiliano Peralta abordó algunas de las principales preocupaciones del presente y derribó varios mitos en torno a la economía nacional.
Criptoestafa y el rol de la desregulación
Consultado sobre la reciente estafa relacionada con criptomonedas, Peralta explicó el mecanismo mediante el cual ciertos actores manipulan el mercado cripto en su beneficio. “Se trata de un esquema en el cual se lanza un token que, tras ser promocionado por figuras de relevancia, aumenta su valor artificialmente debido a la alta demanda generada por compradores reales y bots. Posteriormente, quienes crearon la criptomoneda retiran su inversión antes de que su precio caiga, dejando a miles de personas con activos sin valor”, detalló.
El especialista advirtió sobre la falta de regulación en estos mercados y el impacto que ello puede tener en los pequeños inversores: “La gente busca alternativas de inversión, pero muchas veces hay desinformación, incluso entre economistas. Hay que tener en cuenta qué criptomonedas están reguladas y verificar su respaldo por entidades como la Comisión Nacional de Valores (CNV)”.
Dólar planchado: ¿hasta cuándo?
En relación con la actual estabilidad del dólar, Peralta sostuvo que se trata de una estrategia sostenida por factores coyunturales. “Hoy el dólar está planchado porque el Gobierno cuenta con los dólares de la liquidación del agro y un préstamo del FMI. Sin embargo, la pregunta es cuánto tiempo se podrá sostener esta situación”, señaló.
Sobre la competitividad de Argentina en dólares, explicó: “Cuando el dólar está bajo en términos reales, los turistas que vienen con dólares tienen menos poder adquisitivo. Si, en cambio, hay una fuerte devaluación, a los extranjeros les resulta más barato consumir en Argentina. Este equilibrio es clave para la economía”.
Monopolios y formación de precios
Uno de los mitos más instalados en el discurso económico es que los altos costos de producción en Argentina se deben exclusivamente a la carga impositiva. Al respecto, Peralta fue categórico: “Ese no es el problema principal. La estructura monopólica de ciertos sectores tiene un impacto mucho más fuerte en la formación de precios”.
En su rol dentro de la Comisión de Defensa de la Competencia, advirtió sobre el peso de los monopolios en la economía nacional: “En Argentina hay demasiados monopolios que controlan sectores clave, como el de los alimentos. Por eso vemos que productos como la leche tienen precios más altos que en algunos países europeos. Es fundamental abordar este problema si queremos una economía más competitiva y equitativa”.
Derribando mitos económicos
Durante la entrevista, Peralta también respondió algunas preguntas sobre conceptos económicos instalados en el discurso público. Algunas de sus respuestas fueron contundentes:
- ¿Los aumentos salariales generan inflación? No, es un mito. No hay una relación automática entre suba de salarios e inflación.
- ¿La inflación es siempre un fenómeno monetario? En Argentina, no. Hay múltiples factores en juego, más allá de la emisión monetaria.
- ¿La obra pública no genera empleo ni crecimiento? Falso. La obra pública genera trabajo y dinamiza la economía.
- ¿Hay monopolios que fijan precios en Argentina? Sí, demasiados. Esto impacta en el precio final de los productos de consumo masivo.
Finalmente, Peralta concluyó que la comunicación del gobierno de Javier Milei gira en torno a temas como déficit fiscal, reservas y libertad de mercado, pero omite aspectos cruciales como la industria, el empleo y la capacidad adquisitiva de los trabajadores. “Todo está interconectado y es importante discutir estos temas con datos reales”, cerró el economista.