Descargas irregulares, tarifas y tensiones políticas: los debates que marcaron el cierre del año legislativo en Pueblo Esther

La concejala Carina Cappelletti analizó los principales temas tratados en el Concejo Municipal, desde la urgente regulación ambiental de los camiones atmosféricos hasta el reajuste tarifario de CLESAPE y el clima político que atraviesa al cuerpo legislativo.

En el cierre del período de sesiones ordinarias del Concejo Municipal, la concejala Carina Cappelletti brindó un extenso análisis sobre los debates que atravesaron la agenda legislativa en las últimas semanas, con eje en problemáticas sanitarias, tarifarias y en el modo en que se está construyendo la discusión política dentro del recinto.

Uno de los temas centrales fue la regulación de la actividad de los camiones atmosféricos, una problemática que, según explicó, se agravó a partir de la decisión de la ciudad de Rosario de restringir la descarga de efluentes únicamente a su jurisdicción. Esa medida obligó a localidades de la región a resolver internamente el destino de los residuos cloacales, generando situaciones desordenadas y, en muchos casos, graves desde el punto de vista sanitario. Carina Cappelletti detalló que en Pueblo Esther comenzaron a registrarse descargas en zanjas, desagües pluviales y sectores rurales, incluso en cercanías del arroyo Frías, lo que motivó numerosas denuncias vecinales acompañadas de fotos y videos.

La concejala explicó que, de manera transitoria, el municipio había acordado con las empresas locales que las descargas se realizaran en el piletón ubicado al fondo de calle San Juan, donde el agua recibe tratamiento. Sin embargo, con el correr de los meses se detectaron incumplimientos reiterados y la aparición de camiones provenientes de otras localidades, lo que profundizó el problema. En ese marco, sostuvo que la urgencia principal es ambiental y sanitaria, y que resulta imprescindible prohibir de manera efectiva las descargas en lugares no habilitados.

En relación al proyecto de ordenanza enviado por el Ejecutivo, Cappelletti remarcó que el mayor punto de discusión no estuvo en las restricciones ambientales, sino en la fijación de un canon que las empresas deberían pagar por cada descarga. Señaló que si bien es necesario establecer un esquema de recaudación, esa definición no puede tomarse de manera improvisada ni sin estudios técnicos, ya que existe el riesgo de que el costo termine trasladándose directamente a los vecinos. En una ciudad donde gran parte de los hogares no cuenta con red cloacal, muchas familias deben recurrir al servicio de camiones atmosféricos al menos una vez por mes, pagando valores que ya oscilan entre los 40 y 50 mil pesos. “No se puede definir un canon sin analizar experiencias comparadas ni evaluar su impacto social”, advirtió, y sostuvo que por ese motivo se acordó desdoblar la ordenanza: avanzar de inmediato con la regulación ambiental y dejar la discusión del canon para el próximo período legislativo.

Otro de los ejes abordados fue el plan de mejoras y reajuste tarifario de CLESAPE. La concejala explicó que los aumentos propuestos se encuentran dentro de los márgenes establecidos por el ENRESS y están directamente vinculados al plan de obras trienal que apunta a la expansión del servicio de agua potable en barrios que aún no están conectados a la red, mediante obras de cañería e impulsión. En ese sentido, cuestionó los planteos que desligan el reajuste tarifario del plan de inversiones y recordó que la cooperativa no puede aplicar incrementos por fuera de los límites fijados por el ente regulador.

En el plano político, la concejala fue crítica del clima que se vive en el Concejo tras la nueva conformación del cuerpo. Señaló que se instaló una lógica de “show permanente”, con prácticas que priorizan la exposición mediática por sobre el debate serio y fundamentado. En ese marco, cuestionó duramente la difusión de información falsa y la utilización de redes sociales para adjudicarse logros que no surgen de propuestas concretas sino de decisiones colectivas o del propio Ejecutivo.

Un ejemplo de ello, según relató, fue la discusión en torno al acceso al camping municipal. Durante el debate de la ordenanza tributaria, se planteó la necesidad de facilitar el ingreso de las familias de Pueblo Esther en un contexto económico adverso. A partir de una propuesta inicial para establecer un abono mensual con descuento para residentes, el Ejecutivo avanzó con una medida más amplia: el acceso gratuito al camping de lunes a viernes para vecinos y vecinas de la ciudad, manteniendo el cobro los fines de semana. Carina Cappelletti remarcó que esa decisión fue adoptada por el gobierno municipal y avalada por el Concejo, y cuestionó que luego se presentara públicamente como una iniciativa individual.

Finalmente, la concejala hizo hincapié en otras discusiones que quedaron pendientes para el próximo año, como el tratamiento del presupuesto municipal, que ingresó con retraso, y la necesidad de avanzar en una mayor segmentación de la Tasa General de Inmuebles en función no sólo de la zona, sino también de la calidad real de los servicios que se prestan. Según explicó, hay barrios que pagan tasas por prestaciones que no reciben de manera adecuada, lo que requiere una revisión profunda del esquema tributario.

Con un tono crítico pero enfocado en la gestión, sostuvo que el desafío hacia adelante es recuperar debates basados en datos, responsabilidad institucional y respeto por la palabra, en un contexto social y económico complejo que exige decisiones cuidadosas y políticas públicas que no recaigan siempre sobre el bolsillo de los vecinos.