El abogado Nicolás Ciccone explicó en detalle los alcances del reciente decreto del gobierno italiano que limita el acceso a la ciudadanía por descendencia. También se refirió a su impacto en los trámites ya iniciados y a las opciones legales disponibles para quienes quedaron excluidos.
El gobierno de Italia aprobó recientemente un decreto que modifica los requisitos para acceder a la ciudadanía italiana por descendencia, medida que afecta de forma directa a miles de argentinos que estaban en proceso de iniciar el trámite o que tenían intenciones de hacerlo. En diálogo con Radio Enlace, el abogado Nicolás Ciccone, especializado en ciudadanías europeas, explicó el alcance de esta nueva legislación, su impacto inmediato y las alternativas que se presentan para quienes ya habían comenzado el proceso o desean hacerlo a futuro.
Según detalló, la principal modificación introducida por el decreto del 27 de marzo de 2025 limita la transmisión de la ciudadanía italiana a hijos y nietos de italianos nacidos en Italia, excluyendo a generaciones posteriores. Hasta el momento, el sistema permitía solicitarla sin límite generacional, siempre que se pudiera acreditar la línea de descendencia mediante actas de nacimiento, matrimonio y defunción correspondientes.
“Esto representa un cambio estructural en la política de ciudadanía italiana, que históricamente se basó en el principio del ius sanguinis o derecho de sangre. Hoy, se acota ese derecho y se impone una condición generacional que deja afuera a quienes no puedan demostrar ese vínculo en el segundo grado”, explicó Ciccone.
Trámites iniciados antes del decreto
Una de las principales dudas que generó la entrada en vigencia del decreto fue qué ocurriría con las solicitudes ya presentadas. Al respecto, Ciccone aclaró que las carpetas iniciadas antes del 27 de marzo no se verán afectadas por la nueva normativa. “La norma publicada en el boletín oficial establece que los trámites iniciados con anterioridad a su entrada en vigencia se regirán por la ley vigente al momento de su presentación. Es decir, no se aplicará retroactivamente”, sostuvo.
Esto incluye tanto las gestiones iniciadas en consulados como aquellas en curso por la vía judicial.
Incremento sostenido en los pedidos de ciudadanía
El abogado reconoció que en los últimos años se produjo un incremento exponencial en las solicitudes de ciudadanía, especialmente durante períodos de crisis en Argentina. “Vemos que muchas personas lo hacen por previsión, como una herramienta más ante un eventual proyecto migratorio o pensando en el futuro de sus hijos. Otros, directamente, lo hacen para emigrar”, señaló. En ese sentido, destacó que Brasil, Argentina y Perú son actualmente los países con mayor cantidad de solicitudes de ciudadanía italiana en el exterior.
Beneficios de contar con la ciudadanía
Entre los beneficios de obtener la ciudadanía italiana, Ciccone mencionó la posibilidad de residir y trabajar legalmente en cualquier país de la Unión Europea sin restricciones de tiempo, el acceso a servicios de salud, educación y empleo en blanco, y también viajar a Estados Unidos sin visa. Además, habilita el acceso a otros beneficios, como créditos bancarios, en igualdad de condiciones con ciudadanos nacidos en territorio italiano.
La vía judicial como alternativa
Ante el endurecimiento de los requisitos, la vía judicial se consolida como una opción concreta para quienes quedaron fuera del nuevo régimen. Según explicó Ciccone, la acción consiste en presentar una demanda ante la justicia italiana, acreditando el vínculo familiar con un ancestro italiano y solicitando el reconocimiento de la ciudadanía, con el argumento de que la nueva normativa viola principios constitucionales, como la irretroactividad de la ley.
“La ciudadanía italiana se adquiere por sangre, no por residencia ni por lugar de nacimiento. Por eso entendemos que una persona nacida bajo la vigencia de la ley anterior, que preveía el acceso sin límite generacional, no puede ser afectada por una ley posterior que le quite ese derecho”, sostuvo.
Ciccone afirmó que los argumentos jurídicos ya están siendo trabajados por distintos estudios y que es probable que haya presentaciones masivas en los tribunales italianos. “Cada trámite se realiza en forma individual o familiar. Si varias personas descienden del mismo ancestro italiano, pueden unificar su presentación, lo cual reduce significativamente los costos del proceso”, explicó.
¿Cómo iniciar el trámite?
Para iniciar un proceso judicial por ciudadanía italiana, se requiere reunir la documentación básica que acredite el vínculo con el ancestro italiano. El estudio de Ciccone asesora en la búsqueda de actas faltantes y en la preparación de la carpeta. “Primero hacemos una entrevista para evaluar el caso y, luego, si la documentación es viable, iniciamos el trámite judicial en Italia. Actualmente, el plazo estimado es de un año a un año y medio para obtener una resolución, aunque puede variar”, detalló.
También explicó que, si bien el juicio tiene un costo elevado, es hoy la única vía posible para muchos argentinos, ya que los turnos consulares se encuentran prácticamente bloqueados y las nuevas restricciones hacen inviable el camino administrativo tradicional.
Ciudadanía española: plazos y oportunidades
Finalmente, Ciccone informó que también se encuentra vigente, hasta octubre de 2025, la posibilidad de tramitar la ciudadanía española a través de la Ley de Memoria Democrática. Esta normativa habilita el acceso a descendientes de españoles exiliados o emigrados por causas políticas, y contempla situaciones como la de nietos de abuelas españolas que no hayan perdido la nacionalidad.
“El trámite es más rápido y económico que el italiano, pero el tiempo es muy acotado. Es importante que quienes estén en condiciones de iniciarlo lo hagan cuanto antes”, advirtió.
Contacto para consultas sobre ciudadanía italiana o española:
🌐 Sitio web: https://cicconeabogados.com/
📱 Instagram: @ciudadanias.ciccone
📞 Teléfono: +54 341 312 4119
El estudio brinda asesoramiento personalizado y acompañamiento integral en la preparación de trámites consulares o judiciales. Según señaló Ciccone, “pese a las nuevas restricciones, aún es posible acceder a la ciudadanía con las herramientas jurídicas adecuadas y una correcta preparación del caso”.
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