La concejala Carina Cappelletti detalló el encuentro entre ediles y vecinos afectados por la falta de transporte público en Pueblo Esther. Denunció un escenario de monopolio, reclamó la intervención del Estado y presentó un proyecto para que el transporte escolar municipal traslade a estudiantes a TecnoLagos. Las posturas dentro del Concejo reflejan tensiones políticas y diferencias de fondo sobre cómo abordar el problema.
La semana comenzó con una reunión clave en el Concejo Municipal de Pueblo Esther, donde un grupo numeroso de vecinos afectados por el mal funcionamiento del transporte público se hizo presente para exigir soluciones. La concejala Carina Cappelletti, en diálogo con este medio, explicó los principales ejes del encuentro, trazó un diagnóstico sobre el problema y expuso las propuestas que impulsa desde su banca.
“El transporte público viene empeorando desde hace años, y es fundamental entender que se trata de una problemática que excede lo local”, afirmó Cappelletti. “La situación actual es el resultado de un sistema de monopolios que operan sin competencia, con la connivencia de distintos niveles del Estado”, denunció, aludiendo al retroceso de líneas como la Cerodino —en particular la M Verde— que en su momento ofrecía una frecuencia aceptable y recorría la AO12, conectando múltiples barrios hoy desatendidos.
La concejala fue enfática en señalar que la crisis del transporte debe pensarse de manera integral. “Esto tiene que ver con decisiones nacionales, como la quita de subsidios, pero también con la Secretaría de Transporte provincial que acuerda con las empresas, y con el rol de los municipios que deben gestionar activamente en función de las necesidades locales”, remarcó.
El proyecto: Transporte escolar municipal hacia TecnoLagos
Entre las propuestas concretas surgidas en este contexto, Cappelletti presentó un proyecto de ordenanza que propone utilizar los vehículos escolares municipales para trasladar a los estudiantes secundarios que asisten a TecnoLagos, una de las instituciones más concurridas de la región.
“Actualmente hay 171 chicos y chicas de Pueblo Esther que van a TecnoLagos. El transporte público no garantiza que lleguen a horario. Por eso propusimos que el micro que lleva a los niños de primaria, una vez finalizado ese recorrido, continúe hacia la ruta 21 y llegue al instituto”, explicó. También planteó que podría implementarse un registro de estudiantes que necesiten este servicio, para organizar de forma más eficiente los recursos del municipio durante el ciclo lectivo.
La edil dejó en claro que esta medida no resuelve la problemática de fondo, pero sí puede dar respuesta a una necesidad urgente y concreta de muchas familias mientras se trabaja en soluciones estructurales.
Tensiones políticas dentro del Concejo
Durante la reunión con los vecinos, también se evidenciaron diferencias entre los bloques del Concejo. Cappelletti relató un episodio que ilustra cómo el tema del transporte se cruza con los tiempos y las estrategias electorales. “La concejala Compiano salió a decir en los medios que había presentado un proyecto en 2023. Pero lo que presentó fue una minuta de comunicación, no un proyecto de ordenanza. Hay una gran diferencia: una minuta es un pedido, un proyecto implica pensar soluciones en perspectiva”, explicó.
Otro contrapunto se dio con la concejala del espacio de Pullaro, quien propuso contratar un servicio privado —como una traffic— para cubrir el recorrido hacia TecnoLagos. Para Cappelletti, esta alternativa atenta contra derechos ya conquistados, como el boleto educativo gratuito, y promueve una lógica privatizadora. “No se trata de regalar nada: los derechos se conquistan. La educación y el acceso a ella no pueden depender del mercado”, sentenció.
La concejala subrayó que estas diferencias reflejan proyectos de ciudad distintos: “¿Queremos una ciudad con más servicios públicos o una ciudad con transporte privado, barrios cerrados y servicios para quien pueda pagarlos?”, preguntó retóricamente.
El rol del Ejecutivo y la necesidad de una mesa conjunta
Uno de los reclamos más fuertes que surgió del encuentro fue la falta de apertura del Ejecutivo local. “Hace tiempo que el Ejecutivo se cerró al diálogo, tanto con los vecinos como con el Concejo. Es urgente crear una mesa de trabajo entre el Ejecutivo, los concejales y los vecinos organizados. Solo así se puede coordinar una respuesta a esta crisis”, sostuvo Cappelletti.
Además, destacó el poder de la organización vecinal: “Los vecinos juntaron más de mil firmas. Eso habla de una necesidad real, de una urgencia que no puede seguir siendo ignorada”, dijo.
Finalmente, Cappelletti remarcó que la crisis del transporte no afecta solo a Pueblo Esther. “Este es un problema que se replica en todas las localidades del corredor. Incluso en ciudades con más líneas, los colectivos llegan colapsados desde San Nicolás. Es hora de pensar una estrategia regional para enfrentar esta situación de manera articulada”, propuso.
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