El equipo de Ariel Holan volvió a hacerse fuerte en el Gigante de Arroyito y derrotó con autoridad a River. La vuelta de Di María marcó el pulso de un equipo que parece haber recuperado confianza y funcionamiento.
Rosario Central volvió a regalarle una alegría a su gente. En una noche de fútbol vibrante en el Gigante de Arroyito, el equipo de Ariel Holan se impuso ante River Plate con una actuación sólida, llena de convicción y con la jerarquía que viene construyendo desde el arranque del torneo. El análisis de Silvio Constantino en su habitual columna deportiva en el programa Garra y Gambeta destacó el crecimiento colectivo del equipo y el compromiso de sus jugadores en un momento decisivo de la temporada.
“El equipo mostró actitud, se plantó con autoridad frente a un rival que siempre exige. No fue un triunfo casual, sino producto de un trabajo que se viene viendo desde hace varias fechas”, señaló Scoponi, al analizar el rendimiento del conjunto auriazul. Según el periodista deportivo, el mérito de Central estuvo en “saber cuándo presionar, cuándo retroceder y, sobre todo, en no perder nunca la concentración”.
El partido tuvo como gran figura a Ángel Di María, quien una vez más demostró por qué su regreso marcó un antes y un después en el equipo. “Lo de Di María es impresionante, no solo por lo que juega, sino por lo que contagia. Tiene jerarquía, experiencia y además transmite calma y confianza al resto del grupo”, destacó. El mediocampista, además de convertir un gol, fue el eje de cada ataque canalla y el encargado de manejar los tiempos del partido.
Central también mostró solidez en la defensa, un aspecto que había sido motivo de preocupación en los últimos encuentros. La dupla central respondió cada vez que River intentó romper líneas, y el arquero mantuvo la seguridad en los momentos más exigentes. “Hay una mejora clara en la parte defensiva. Holan logró equilibrar al equipo y hoy Central es un conjunto que sabe sufrir y sabe jugar”, apuntó el analista.
El segundo tiempo mostró a un Central más suelto y decidido a cerrar el partido sin especular. Las transiciones rápidas, el juego por las bandas y el sacrificio de los mediocampistas marcaron la diferencia ante un River que nunca logró sentirse cómodo. “El Canalla fue inteligente: no se desesperó, esperó el momento justo y golpeó cuando tenía que hacerlo”, comentó, subrayando la madurez táctica del equipo.
El triunfo no solo suma puntos valiosos, sino que reafirma la identidad del conjunto auriazul. “Central tiene alma, tiene proyecto y tiene algo que es fundamental: el Gigante de Arroyito vuelve a ser una fortaleza. Los rivales saben que acá no es fácil ganar”, remarcó en su cierre.
Con esta victoria, Rosario Central se mete de lleno en la pelea por los primeros puestos del campeonato y deja en claro que su objetivo es ir por más. Los hinchas, que acompañaron con un marco imponente, despidieron al equipo con una ovación que se sintió como un mensaje: este Central, con Holan en el banco y Di María como bandera, vuelve a ilusionar.
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