Desde Radio Enlace dialogamos con Juampi, uno de los responsables de Ferretería Le-Al, un comercio que ya es parte del paisaje cotidiano de Pueblo Esther. En la previa del Día del Padre, nos contó sobre promociones, hábitos de compra y cómo se adaptan a un contexto económico desafiante. “La gente sigue arreglando su casa, aunque haya menos plata en la calle”.
En Pueblo Esther hay lugares que ya son clásicos. Y Ferretería Le-Al es uno de ellos. No solo porque está siempre ahí, sobre la ruta, bien visible y bien abastecida, sino también porque, como nos cuenta Juampi —su responsable junto a Ariel—, “abrimos de lunes a sábado, pero también domingos y feriados, de 8.30 a 12.30. Bueno… salvo que cortemos un rato antes, también necesitamos un finde, ¿no?”.
En diálogo con Radio Enlace, Juanchi repasó la situación del comercio en estos meses difíciles, el comportamiento de la clientela y los productos destacados para este Día del Padre. Aunque reconoce que la situación económica impacta, asegura que “la caída no fue tan brusca como en otros rubros. Hay menos plata en la calle, sí, pero la gente sigue comprando, sobre todo productos para el hogar”.
La venta diaria está marcada por dos públicos muy definidos: “Durante la semana nos vienen a comprar técnicos, plomeros, electricistas, albañiles, todos los que trabajan en mantenimiento del hogar. Y el fin de semana se suman los dueños de casa que aprovechan el tiempo libre para hacer algún arreglo. El sábado y el domingo son días muy movidos”.
Y es en esos días donde también se destaca la atención personalizada. “Si venís a buscar ‘el coso del cosito que va en el borde del otro cosito’, es Ariel el que te entiende. Yo estoy más en la parte administrativa”, bromeó entre risas con Mauricio Banchero durante la entrevista.
Juampi también alertó sobre el impacto del fenómeno de El Niño, que traerá un invierno más lluvioso de lo habitual: “Es momento de preparar los techos, impermeabilizar bien con membrana líquida o asfáltica. Después es tarde, cuando ya tenés la gotera en la cabeza”, advierte. Sin embargo, reconoce que la pinturería fue uno de los sectores más golpeados por la recesión: “Ahí sí se nota una baja más fuerte. Es lógico: si no hay urgencia, se postergan esas compras”.
De cara al Día del Padre, Ferretería Le-Al ofrece una variedad de regalos que combinan funcionalidad y aventura. Desde lo tradicional hasta lo más innovador:
“Tenemos desde carpas, termos, cuchillos, sillas plegables, tazas térmicas y cajas de herramientas hasta monopatines eléctricos con autonomía de 25 km. Son ideales para moverse por el pueblo o ir al trabajo. Están 750 mil pesos, pero se pueden pagar en 5 cuotas sin interés”.
Además, todos los días hay promociones de 3 cuotas sin interés con tarjeta CABAL del Banco Credicoop y Visa del Banco Macro. “Tratamos de mantener opciones accesibles dentro de lo que se puede, para que nadie se quede sin hacer ese regalo”, explicó.
En definitiva, Ferretería Le-Al es mucho más que una ferretería. Es bazar, es pinturería, es camping y es ese lugar donde —aunque no sepas el nombre técnico— siempre encontrás lo que necesitás. Incluso si lo único que sabés es que buscás “el cosito del coso”.
