Juan Carlos Singereisky denunció un nuevo acto vandálico en la Casa de la Cultura

El médico y concejal electo de Pueblo Esther habló sobre el reciente robo en las instalaciones de Radio Enlace y la destrucción de carteles políticos, en lo que consideró un hecho vinculado al clima de intolerancia política local. “Cada vez que avanzamos, a alguien le molesta”, afirmó.

En una entrevista que por momentos transitó el análisis político, la reflexión social y la denuncia pública, el médico y concejal electo Juan Carlos Singereisky —más conocido como “Moncho”— abordó con seriedad el episodio ocurrido días atrás en la sede de la Casa de la Cultura y Radio Enlace, donde fueron robadas dos cámaras de seguridad y vandalizados carteles de agradecimiento tras las elecciones.

El hecho no solo causó malestar, sino que volvió a encender una alarma en torno al nivel de agresividad e intolerancia que atraviesa la vida política local. “Nos encontramos con que las cámaras habían sido arrancadas y los carteles destruidos. Carteles que solo decían ‘gracias’. Eso es lo que más nos dolió”, afirmó Juan Carlos Singereisky. Y agregó: “Esto no es nuevo. Ya nos pusieron una bomba de alquitrán en la puerta hace cuatro años. Hace dos, nos rompieron el vidrio de la radio con un piedrazo. Ahora esto. Siempre después de una elección”.

“Una política sin proyecto solo puede caer en la chicana”

Juan Carlos Singereisky, médico con amplia trayectoria en salud pública y referente de un espacio político local que prioriza el trabajo territorial, asumirá en diciembre una banca en el Concejo Municipal. Desde allí promete seguir fortaleciendo su modo de hacer política, anclado en la cercanía con los vecinos, la participación ciudadana y la defensa de la salud y la educación pública.

Frente a lo ocurrido, evitó la victimización pero señaló con claridad el contexto. “No creemos que haya sido el viento. Fue un acto intencional. Podría atribuirse a la inseguridad general, pero siempre es contra nuestra casa. Eso ya nos hace pensar otra cosa”, explicó. Y agregó que, en su opinión, estos hechos se inscriben en un clima político que se viene deteriorando y crispando a nivel nacional, y que tuvo expresiones preocupantes también en la campaña local.

“La campaña fue muy agresiva. Hubo mucha chicana, pocas propuestas. Nosotros no teníamos tiempo de hablar mal de otros porque teníamos mucho para contar. Y lo que hicimos fue eso: contar lo que venimos haciendo, lo que queremos hacer. Parece que eso molesta”, señaló.

Para el futuro edil, la diferencia clave está en la forma de construir. “Nosotros hablamos de presupuesto participativo, de consejos barriales, de empoderamiento ciudadano. Eso genera molestia, porque pone en juego una forma de política que no es clientelar ni vertical. Es participación real. Y a eso no todos están dispuestos”.

“La salud es política: construir ciudadanía también es una forma de curar”

Más allá de su rol como futuro concejal, Singereisky continúa ejerciendo la medicina comunitaria y tiene una larga trayectoria como promotor de salud integral. Su concepción de la salud como derecho y fenómeno colectivo quedó expresada con claridad en la charla. “Siempre decimos que la salud no es solo la relación médico-paciente. Es también poder vivir, desarrollarse, crecer, tener voz, opinar, sentirse libre. Y cuando alguien viene y rompe carteles que dicen ‘gracias’, eso también es un ataque a la salud comunitaria”.

Con esa mirada, insistió en la necesidad de transformar el Concejo Municipal y las instituciones públicas en espacios de escucha real y de elaboración colectiva de políticas. “Queremos un Concejo lleno de vecinos. Queremos un SAMCo que vuelva a ser referencia de salud para la comunidad. No puede ser que la gente prefiera ir a un privado, pagar lo que no tiene, porque perdió la confianza en la salud pública local”.

“A los sectores populares no se les perdona una”

En el tramo final de la entrevista, Singereisky también reflexionó sobre la desigual vara con la que suelen medirse los espacios políticos. “Los sectores nacionales y populares somos mucho más observados, más criticados, más exigidos. Si fallamos, no nos perdonan. Otros espacios incumplen promesas o hacen daño directamente, y sin embargo reciben menos condena social. Pero eso también nos obliga a ser mejores”.

Consultado sobre el futuro, anticipó que desde su banca —y junto a la actual concejala Carina “Colo” Cappelletti— buscará ampliar la participación vecinal, jerarquizar los debates y retomar el protagonismo de los temas importantes: salud, educación, acceso a servicios y planificación urbana. También llamó a toda la dirigencia política a hacerse cargo de la baja participación electoral. “No ayuda este clima de enfrentamiento permanente. No ayuda la despolitización. Todos tenemos que hacernos responsables. Pero también hay que ofrecer algo distinto. Y cuando eso pasa, la gente acompaña. Lo vimos en nuestro cierre de campaña: 150 personas un miércoles a la noche, con frío. Eso dice mucho”, destacó.

“Lo que pedimos es respeto”

Aunque el tono de la entrevista fue firme y crítico, Singereisky dejó en claro que no buscarán revancha ni escalar el conflicto. “Vamos a sacar un comunicado para contarle a la comunidad lo que pasó. Nada más. No vamos a acusar sin pruebas. Pero necesitamos que se sepa. Y también queremos que se discuta qué tipo de convivencia política queremos tener en Pueblo Esther”.

Cerró con un mensaje claro: “A quienes hacen este tipo de cosas, solo les pedimos una cosa: respeto. Respeto por quienes piensan distinto, por quienes proponen, por quienes trabajan. No venimos a imponer nada. Venimos a sumar. Y si eso molesta, algo estaremos haciendo bien”.

Nota completa: